Domingo, 12 de febrero del 2012, a las 10:30 hrs.
Hija Mía, cómo lloro cuando veo cuántos están tratando de acabar un homenaje a Mi amado Hijo.
Te dije antes que la batalla ha empezado. Los planes ya han comenzado para acabar la oración pública a Dios Padre y a Su precioso Hijo, Jesucristo, en Inglaterra.
Esto solo es comienzo. Muy pronto será aplicado a las escuelas y otros lugares públicos, hasta que sea ilegal rezar en Iglesias consagradas a Mi Hijo, Jesucristo.
El odio entre los hombres y aquellos en altos lugares hacia Mi Hijo significa que ellos harán todo lo que puedan para acabar con la práctica pública del Cristianismo.
Aquellos que odian a Mi Hijo, dicen que no creen en Mi Hijo. ¿Pero cómo pueden ellos mostrar odio por alguien en que no creen?
Su desprecio para Mi Hijo será más claro, mientras otros países sigan a Inglaterra a acabar la práctica pública del Cristianismo.
Será una ofensa honrar a Mi Hijo.
Otras religiones que creen en Dios Padre también sufrirán.
No obstante, ellos no sufrirán tanto como la Iglesia Católica Romana y otros cristianos. Su sufrimiento llegará a ser intenso.
Recen, hijos, para evitar mucho de este mal mientras llega a ser más evidente, ahora.
Por mucho tiempo, aquellos que reclaman no creer en Mi Hijo, han permanecido escondidos. Ahora, ellos surgirán con confianza y perseguirán a Mi Hijo a través del sufrimiento que infligirán a sus seguidores.
Recen mucho hijos, para proteger su fe y su derecho a honrar a Mi Hijo en público, sin hacerles sentir avergonzados.
Por favor, recen esto, la Cruzada de Oración (29): Para proteger la práctica del Cristianismo:
“Oh Mi Señor Jesucristo, yo Te suplico que derrames Tu Espíritu Santo sobre todos Tus hijos.
Te ruego que perdones a aquellos que tienen odio en sus almas por Ti.
Yo pido que los ateos abran sus endurecidos corazones durante Tu Gran Misericordia.
Y así Tus hijos que Te aman puedan honrarte con dignidad para levantarse sobre toda persecución.
Por favor llena a todos Tus hijos con el don de Tu Espíritu, para que así se puedan levantar con valor y llevar a Tu ejército a la batalla final en contra de Satán, sus demonios y todas aquellas almas, que son esclavas de estas falsas promesas. Amen.”
Vayan en paz hijos Míos y díganle al mundo que se preparen para esta gran injusticia.
Gracias por responder a Mí llamada hoy.
María Reina de todos los Angeles, Madre de la Salvación
www.jesushabla.com