viernes, 2 de marzo de 2012

MARIA DE LA DIVINA MISERICORDIA- SEPTIMO PROFETA

Nunca rechacen a los profetas del Señor

Viernes, 24 de febrero del 2012, a las 21:45 hrs. 

Hija Mía, es imperativo que permanezcas en silencio mientras la persecución empieza. 

La Sagrada Palabra de Mi Padre Eterno, será rechazada por aquellos siervos muy sagrados, que reclaman proclamar la verdad de Su Sacratísima Palabra. 

La Iglesia Católica es la única verdadera Iglesia.

Todas las Iglesias se unen para convertirse en una Iglesia Santa y Apostólica en Mi Segunda Venida.
 

Mientras eso sucede cada Palabra de Mi Padre, dada a un mundo seco espiritualmente, también será ignorada, desafiada o opuesta ferozmente. 
Aquellos que se opondrán ferozmente a Mis mensajes dados a ti, el 7° mensajero de los tiempos del fin, serán divididos en dos campos. 
Aquellos que siguen a Satán a través de la adivinación y la brujería. 

Los otros serán aquellos que están espiritualmente ciegos pero que creen que están divinamente inspirados con el Don del Espíritu Santo. 

Ambos rechazarán la Palabra de Dios, dada a ti por el Espíritu Santo y Mi amada Madre. 

Incluso los sacerdotes buenos, a quien se les ha prohibido apoyar públicamente estos mensajes, se sentirán justificados de vilipendiar Mi Sagrada Palabra, para que todo el mundo lo escuche. 

Con poca humildad en sus corazones, ellos se encaminarán a socavar esta llamada del Cielo, que está siendo dada para ayudar a la Humanidad. 

Estos sacerdotes, clérigos y otros auto-nombrados apóstoles que reclaman conocerme, tratarán de alentar a las almas a rechazar Mi Palabra. 

No tienen vergüenza, pues ellos arrogantemente sacarán Mi Libro de la Verdad aparte, mientras este está siendo revelado a toda la Humanidad. 
Entonces, ellos harán trizas los contenidos con veneno en sus corazones. 

Ellos no quieren oír la verdad porque esta les molestará y les sacudirá el capullo de falsa seguridad dentro del que se envuelven a sí mismos. 

Oh, cuánto Me ofenden! 

Cuánto daño causarán y sin embargo, ellos no se dan cuenta de esto. 

Recen para que estas almas, ciegas a la verdad por la influencia del engañador, abran sus corazones y acepten la Palabra de Dios, así como es presentada a ellos hoy día. 

Ellos no tienen derecho de rechazar públicamente estos mensajes, sin discernirlos con un alma limpia, que debe ser humilde en todas las cosas. 

Mientras Dios permite el sufrimiento experimentado por los visionarios en la Tierra, para asegurar que las almas sean salvadas, El no tolerará el abuso de estos profetas ungidos. 

Tu, hija Mía, eres un profeta. 

Tú aceptas los sufrimientos como un don a Mí.

Pero esto no es acerca de usted, porque tu no es nada sin Mí, y Tu sabes y aceptas esto. 

Dios Mi Padre habla al mundo a través de Sus profetas. 

Es Su palabra que ustedes rechazan cuando ustedes públicamente calumnian a Sus profetas. 

Esto es un pecado ante Sus ojos. 

Nunca rechaz los profetas del Señor!

Nunca herir o dañar a sus profetas de ninguna manera! 

Permanece en silencio todo el tiempo si estás en duda y reza por ellos. 

Ataquen a los verdaderos profetas y el fuego será derramado sobre ustedes desde los Cielos, como castigo por la Mano de Mi Padre. 

Ningún hombre detendrá que la Palabra del Señor sea dada a Sus hijos. 

Esta es la promesa hecha por Mi Padre desde el principio. 

Oigan Su voz! 

Acepten que ustedes están en los últimos tiempos! 

Recen para que estos mensajes sean escuchados, para que así todos los hijos de Dios tengan vida eterna.



Su Maestro, Redentor de toda la Humanidad, Jesucristo


www.jesushabla.com

LOS DEMONIOS TIEMBLAN


ROMA, 01 Mar. 12 / 11:15 pm (ACI).- El P. Gabriel Amorth, sacerdote exorcista de la diócesis de Roma (Italia) y uno de los más conocidos del mundo, aseguró que cuando menciona a Juan Pablo II y a Benedicto XVI, los demonios llegan al punto de llorar y suplicar que no los nombre más.
El informativo italiano La bussola quotidiana difundió un extracto del más reciente libro de Amorth, titulado "El último exorcista – Mi batalla contra Satanás", en el que el sacerdote asegura que al nombrar "a Juan Pablo II, los demonios escupen rabia. Otros tiemblan. Otros lloran y suplican que no lo nombre más. Y esto también sucede con Benedicto XVI".
"Cada gesto de Joseph Ratzinger, su liturgia, son un poderoso exorcismo contra la furia del demonio".
En el libro, escrito junto al vaticanista Paolo Rodari, Amorth señaló que "Satanás ataca sobre todo al Papa. Su odio por el sucesor de Pedro es feroz. Lo he experimentado en mis exorcismos".
"Después del Papa, Satanás ataca a los cardenales, obispos y a todos los sacerdotes y religiosos. Es normal que sea así. Ninguno se debería escandalizar. Los sacerdotes, religiosos y religiosas, están llamados a una dura lucha espiritual".
El famoso exorcista exhortó quienes han discernido por la vocación religiosa o sacerdotal a no ceder ante el diablo. "Si abren la puerta de su alma al diablo, aunque sea ligeramente, éste entra y les toma toda su vida", afirmó.
Amorh aseguró que "el mundo está bajo el poder del diablo. Y junto con Satanás muchos de sus profetas. Personas que la Biblia llama los falsos profetas. Falsos porque llevan a la mentira y no a la verdad".
"Estas personas existen tanto fuera como dentro de la Iglesia. Son fácilmente reconocibles: dicen que hablan en nombre de la Iglesia pero hablan en nombre del mundo. Exigen de la Iglesia que asuma los roles del mundo, y hablando así confunden a los fieles y llevan a la Iglesia a aguas que nos son las suyas. Son las aguas del Maligno".
En su libro, el presbítero recordó que "la ira de Satanás ha existido desde el principio del mundo. Pero cuando Dios ha enviado al mundo a su Hijo, Jesús, esta rabia ha aumentado. Con la venida de Cristo el choque entre los dos ejércitos se hace directo. Satanás incita al pueblo contra Cristo y se las arregla para convencerlo de que debe matarlo".
"La muerte de Jesús es la victoria de Satanás. Una victoria aparente, porque en realidad con la Resurrección es Cristo quien triunfa. Pero su victoria no elimina el mal. No elimina la presencia del dragón, la bestia, Satanás. Éstos todavía permanecen, pero desde la venida de Cristo el hombre tiene la certeza de que, si confía en Él, puede vencer. A pesar de las dificultades de la vida puede vencer a la muerte".
Gabriel Amorth afirmó que "hoy en día, dos mil años después de la venida de Cristo, la lucha es más feroz. Estamos en un choque final. Por un lado, el ejército de Satanás. Por el otro el ejército de Dios con todos sus santos y mártires, que derramaron su sangre en beneficio de los que permanecen en el combate. Cada gota de sangre de los mártires es usada por Dios en esa lucha continua contra el diablo".
"El ataque de Satanás está destinado principalmente a quienes ostentan puestos de poder en el mundo. Porque atacar a los hombres que tienen grandes responsabilidades equivale a atacar en cascada a muchísimas personas. Y después, los más atacados son los hombres de la Iglesia".
Al referirse al título del libro, Amorth explicó que "es obvio que no yo no soy el último exorcista en este mundo. Después de mi vendrán otros, es más, ya han venido, incluso jóvenes. Pero en el mundo somos tan pocos que cada uno de nosotros en su batalla diaria se siente inevitablemente como si fuera el último, el último exorcista llamado a combatir contra el gran enemigo, el príncipe de este mundo, Satanás".
"La Iglesia, todavía hoy, hace muy poco por formar a nuevos exorcistas. Hacen poco los obispos. Es ésta mi queja y por ese motivo he aceptado que el libro saliese con este título".