MARIA DE LA DIVINA MISERICORDIA

No es suficiente creer en el Padre, porque aquellos que rechazan a Su Hijo rechazan la salvación.

Sábado, 14 de julio del 2012, a las 15:15 hrs.

Mi muy querida y amada hija, muchísimas religiones en el mundo siguen el camino errado, de este modo hacen difícil a los hijos de Dios obtener la vida eterna.

La vida eterna, solo fue hecha posible por Mi Muerte en la Cruz.

Mi Padre, que Me envió a Mí, Su único Hijo, como el Cordero sacrificial, lo hizo posible para que la Humanidad entra obtenga la salvación y la vida eterna.

La vida eterna fue dada como un don a Adán y a Eva. Luego, por la mancha del pecado y la desobediencia, ésta fue quitada.

En su lugar, el hombre se hizo mortal, su cuerpo impuro, su vida en la forma física imperfecta y la Tierra se hizo una pobre imitación de la rica y espléndida Tierra, creada para Adán y Eva en el Jardín del Edén.

Dios, Mi Padre Eterno, entonces, concedió la salvación a aquellos que Me aceptaran a Mí, Su Hijo unigénito, como el camino al Nuevo Paraíso.

Solo a través Mío pueden ustedes ser aceptados por Mi Padre.

No es suficiente creer en el Padre, porque aquellos que rechazan a Su Hijo rechazan la salvación.

Recuerden que hay muchísimos de los hijos de Dios que, por ignorancia, no Me reconocen a Mí, el Salvador de la Humanidad, pero que por Mi Gran Misericordia, la Verdad les será revelada a ellos por divina intervención.

Ellos son todos iguales a los ojos de Mi Padre y El quiere reunir todas esas almas dentro de Su seno. El las ama a todas ellas.

Cuando ellas vean la prueba, aceptarán que el Dios Altísimo, les dio el don de la vida eterna, a través de Mi Sacrificio en la Cruz. De esta manera, todos adorarán al único Dios.
 
Porque hay solo un Dios, que los creó a cada uno de ustedes.

Ahora ve, hija Mía y ayuda a asegurar que Mis mensajes sean dados a todos los credos, a todas las naciones y a todos los hijos de Dios.

Yo incluyo a todos los paganos y a aquellos con corazón de piedra.

No importa si ellos te escupen, o se rehúsan a escuchar, tú debes darles los mensajes.

Cualquier hombre o seguidor Mío, su Jesucristo, que no puede aceptar que Yo deseo comunica la Santa Palabra de Dios a todas las religiones, no es un verdadero cristiano.

Muchísimos han rechazado estos, Mis mensajes al mundo, porque Yo abrazo a toda la Humanidad y a toda otra religión, incluida la de los ateos.

Ustedes no tienen el derecho de asumir que solo ustedes, los verdaderos cristianos, son amados por Dios, Mi Padre Eterno.

Ustedes son bendecidos y amados, pero sin la conversión de la Humanidad entera, Mi Padre no alcanzará la victoria que El quiere, para reunir a todos Sus hijos. 

Ustedes, Mis seguidores, tienen una gran responsabilidad por el Don de la Verdad dado a ustedes.

Es su deber difundir Mi Santa Palabra, con el fin de traer a aquellas pobres almas, que son ignorantes de Mi existencia, dentro del Reino de Dios.

Su Jesús