miércoles, 15 de agosto de 2012

MARIA DE LA DIVINA MISERICORDIA

Cuando, deliberadamente mentirosos sobornó a negar Mi Resurrección, los Fariseos negaron a generaciones de Judíos el derecho a la Verdad.

Sábado, 4 de agosto del 2012, a las 10:35 hrs.

Mi muy querida y amada hija, la Humanidad debe entender la debilidad de la naturaleza humana, antes de que ellos verdaderamente se encomienden a los brazos de Dios.

A aquellos fieles entre ustedes, su fe y amor por Mi, su Salvador, Me trae gran alegría.

Pero cuando dicen que Me aman, esto trae consigo una gran responsabilidad.

Nunca olviden la debilidad de su naturaleza, aunque no es su culpa, porque nacieron con el pecado original, ya que éste puede dar ocasión de pecar cuando menos lo esperan.

Cuando las almas de aquellos, que dicen que Me aman, alcanzan un nivel en donde son consumidos con el amor por Mí, es cuando tienen que tener cuidado. Algunas veces, esto les hace sentir elevados ante Mis Ojos, lo cual es verdad porque lo están.

Pero luego viene la tentación de ver a los otros con una luz menos favorecedora.

Ellos pueden ser tentados a, no solo sentir compasión por aquellas pobres almas que están en tinieblas o confundidas, sino a mirar para abajo, sobre ellos.

Algunas veces, su fuerte fe y conocimiento de las escrituras, les da una sensación de seguridad.

Ellos creen que lo saben todo acerca de las enseñanzas de la Iglesia, Mi Iglesia, Mi Cuerpo en la Tierra.

Esto es lo que les sucedió a los fariseos.

Ellos pensaron que lo sabían todo acerca de las Leyes de Dios, el Amor de Dios.
 
En lo que ellos fallaron en entender fue en las profecías, predichas muy claramente, acerca de la venida del Mesías. Esto significó que rechazaran al Cristo, el Hijo del Dios Vivo, cuando El vino como lo fue prometido.

La crueldad que Me mostraron a Mí, Jesucristo, el Hijo del Hombre, estuvo en completa contradicción al amor que ellos reclamaban tener a Dios.

Si ellos verdaderamente amaban a Dios, nunca debieron tratar a ningún hijo de Dios como lo hicieron.

Sus mentes estaban cerradas a las profecías, dadas al mundo a través de los profetas, que proclamaban la Verdad.

La verdad es que todas las profecías serán cumplidas, como fueron prometidas por Dios.

Ellos rechazaron al Mesías, prometido para proveer la futura salvación para la Humanidad entera.

A su vez, a través de las mentiras, cuando ellos deliberadamente mentirosos sobornó a negar Mi Resurrección, los Fariseos negaron a generaciones de Judíos el derecho a la Verdad.

Mi muerte en la Cruz no fue suficiente para ellos. Querían asegurarse de que no existiera ninguna huella de Mí, el Redentor del mundo, posteriormente.

Luego regresaron y condujeron a los hijos de Dios a una falsa fe, en la que la Verdad se convirtió en una mentira.

Recuerden que las profecías de Dios siempre se cumplen.

Mi Segunda Venida está ahora por ser cumplida. Esta vez los líderes de las Iglesias Cristianas Me negarán, como lo hicieron los Fariseos.

Me atormentarán a Mí, a Mis profetas, a Mi pueblo y a cualquiera que se atreva a difundir la Verdad de Mi Venida.

No Me nieguen esta vez!

Abran sus corazones!

Escúchenme cuidadosamente, mientras los preparo para el último capítulo de la Salvación del mundo!

Su Jesús

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