martes, 21 de febrero de 2012

MARÍA DE LA DIVINA MISERICORDIA

Dios el Padre: La rebelión de vez en aceptar mi sello, el sello del Dios VivienteLunes, 20 de febrero 2012 @ 12:20 am
Mi querida hija Mi corazón palpita en el dolor por los pecados de mis hijos.
Como cualquier padre amoroso de su odio impío, para cada uno de las lágrimas el otro mi corazón en dos.
Es como una espada atravesando mi corazón, que no va a desaparecer.
Yo soy el Dios del Altísimo que, a causa del libre albedrío que he dado a todos Mis hijos, tendrá que sufrir soportando el dolor hasta que el nuevo paraíso en la Tierra evoluciona.
Entonces mis hijos se unen al unísono con mi santa voluntad.
Hasta que eso ocurra, no puede haber paz en la tierra.
Sólo cuando el mal, y aquellos que ciegamente siguen las mentiras que promete, se destruyen finalmente el mundo se calme.
Mi hija digo a mis hijos que no disfrutan de los pensamientos de castigar a mis hijos porque los ama.
Son míos, mi querida creación. Para ver cómo el maligno ha corrompido el alma es un tormento constante para mí, su amado Padre.
Deseo tener a todos ustedes amantes de los niños que conocen y entienden mi amor por ti, en mi hermoso paraíso en la tierra nueva.
Les prometo que la persecución será rápido y que usted estará protegido.
Por ahora legar el sello de mi amor y protección.
Con esto se escapan a la atención de los que provoca una dificultad en sus países.
Mi sello es mi promesa de salvación. Mi poder surgir a través de usted con este sello y no le pasará a usted.
Se trata de un milagro, los niños y sólo aquellos que se inclinan delante de Mí, su Señor y Creador de todas las cosas, como los niños con amor en sus corazones para mí, puede ser bendecido con este don divino.
Levántate ahora y aceptar mi sello, el sello del Dios vivo.
Recita esta oración cruzada (33) a reconocer mi sello y aceptarla con amor, alegría y gratitud.
Oh mi Dios, mi Padre amorosoAcepto con amor y gratitudSu sello divino de la Protección
Su Divinidad abarca mi cuerpo y alma para la eternidadMe inclino con humilde gratitud y ofrecerle mi profundo amor y lealtadPara mi querido padre
Le ruego que proteger a mí ya mis seres queridos con este sello especialY yo doy mi vida a su servicio siempre y para siempreTe amo Querido PadreYo te consuele en estos tiempos Queridos Padre
Te ofrezco el Cuerpo, Sangre, Alma y Divinidad de tu amadísimo HijoEn expiación por los pecados del mundo y por la salvación de todos sus hijos.
Amén.
Vaya, mis hijos y no temen. Confía en mí, su amado Padre que con amor creó a cada uno de ustedes.
Sé que cada alma, cada parte de ti que se conoce a mí. Ninguno de ustedes es amado menos que el otro.
Debido a esto no quiero perder una sola alma. Ni uno solo.
Por favor, continúen orando mi coronilla de la Divina Misericordia todos los días.
Un día, se entiende por qué esta purificación es necesaria.
Su amoroso Padre CelestialDios del Altísimo

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